Entre bulos y bolas

¿Esta fiesta quién la paga?

No es un bulo que existe gente buena, pero tiene muchas bolas que el buenismo infantiloide impuesto nos vaya a matar a todos.

No es bulo que el presidente de la Generalitat valenciana sea un inútil total, pero tiene muchas bolas que se aproveche tal circunstancia con dolo y alevosía para hacer política partidista con cadáveres aún en el barro.

No es un bulo que el boxeador Imane Khelif sea un hombre al que le dieron una medalla por apalizar a varias mujeres en los JJOO de París aplaudido por mediomundo, pero tiene muchas bolas que los señores corruptos del COI que lo permitieron no estén en la cárcel o, al menos, exijan que ese tramposo devuelva la medalla y se la den a la boxeadora que le corresponde.

No es un bulo que en España quedan buenos periodistas, pero tiene muchas bolas que la mayoría de los dueños de los medios de comunicación los vendan al mejor postor y dejen de ser periodistas para pasar a ser repetidores del relato mejor pagado.

No es un bulo que Donald Trump es un personaje detestable y que atesora muchas de las peores cualidades que puede tener un ser humano, pero tiene muchas bolas que quienes lo critican olvidan que su contrincante también apoyaba entusiastamente el genocidio palestino y las deportaciones masivas de inmigrantes, entre otras lindeces.

No es un bulo que RTVE tenga grandísimos profesionales, pero tiene muchas bolas que el consejo que lo dirige la esté convirtiendo en el nuevo NO-DO posmoderno.

No es un bulo que la ciudadanía de nuestro es sinceramente solidaria, pero tiene muchas bolas que en cuanto cambian los titulares pierden la memoria y la solidaridad.

No es un bulo que exista el cambio climático, pero tiene muchas bolas que en nuestra sociedad privilegiada y aislada friamos a los ciudadanos y ciudadanas a impuestos para recoger la basura casi cosa por cosa en honor al reciclaje, mientras los gobiernos compran bonos de contaminación a los países más pobres, para que la industria pueda seguir haciendo lo que le venga bien.

No es un bulo que el guarro de Errejón pueda acabar siendo declarado agresor sexual, pero tiene muchas bolas que se llamara “feminista” a ese personaje y a todos los partidillos donde ha estado cuando se han hartado de pedir porno duro y prostitución legal para que lo que hacen deje de estar mal visto.

No es un bulo que la “civilización occidental” esté en un momento crítico en el que peligra su existencia, pero tiene muchas bolas que ante la ofensiva neomoralista de la Woke-Inquisición alguien se extrañe de que no hemos llegado hasta aquí como sociedad para que cuatro niñatos fluidos y eco fachas, que no han pegado un palo al agua en la vida y que a duras penas sabrán que ha habido dos guerras mundiales, nos digan si somos de los buenos o de los malos, siguiendo únicamente los criterios de sus obtusas mentes.

No es un bulo que hay mucha gente que apoya la situación actual, pero tiene muchas bolas que ese apoyo se circunscriba no a las ideas, sino al ingreso mensual que les llega, por miserable que sea.

No es bulo que defienden por ahí que si un hombre se pinta las uñas se convierte en mujer, pero tiene muchas bolas que no sepas que, si eso te lo defiende un político te va a engañar también en todo lo demás a su conveniencia.

No es un bulo que agredir a alguien en una manifestación no está bien, pero tiene muchas bolas que ahora cualquiera que protesta contra el discurso oficial es un fascista de brazo en alto.

No es un bulo que hay que respetar a los muertos, pero tiene muchas bolas querer hacer una manifestación silenciosa porque pasa de ser manifestación a ser pantomima.

Y, por último, no es un bulo que existe gente buena, pero tiene muchas bolas que el buenismo infantiloide impuesto nos vaya a matar a todos.

Compartir: