La mayoría de los arrastreros del Mediterráneo occidental apenas son rentables debido a la sobrepesca, según revela un nuevo estudio Oceana insta a Francia, España e Italia a reducir la sobrecapacidad, reconstruir las poblaciones pesqueras y redirigir la financiación hacia una flota más selectiva
Bruselas – Un informe publicado hoy revela que existe un número excesivo de buques pesqueros compitiendo por poblaciones sobreexplotadas en el Mediterráneo occidental, lo que sitúa a muchos segmentos de arrastreros de fondo en una situación de rentabilidad marginal, cuando no directamente deficitaria, pese a la inyección continuada de subsidios públicos. El informe, encargado por Oceana, identifica la necesidad de que los Ministerios de Pesca español, francés e italiano adopten un cambio estratégico para abordar el exceso de capacidad, restaurar las poblaciones pesqueras y redirigir los fondos públicos, dejando de subvencionar a operadores no rentables y apoyando en su lugar a quienes practican una pesca más selectiva y sostenible.
El informe evalúa el impacto económico del plan plurianual para el Mediterráneo occidental (West Med MAP por sus siglas en inglés) en las flotas de arrastre de fondo españolas, francesas e italianas. Sus conclusiones ponen de manifiesto un persistente desequilibrio estructural desde hace al menos una década entre el número excesivo de buques pesqueros de la región y el bajo nivel de abundancia de las poblaciones pesqueras, una situación insostenible que lastra tanto la rentabilidad de las flotas como la recuperación de las poblaciones. Según el informe, los grandes arrastreros franceses y los pequeños arrastreros italianos llevan años sufriendo una ausencia crónica de rentabilidad. Los buques compiten por poblaciones ya sobreexplotadas, una práctica que persiste desde antes incluso del periodo de nueve años objeto del estudio y choca con el objetivo del plan de restaurar las poblaciones pesqueras hasta alcanzar niveles saludables, algo que aún no se ha logrado.
Giulia Guadagnoli, asesora política sénior de Oceana para Europa, sostiene que: “La flota está sobredimensionada y las poblaciones sobreexplotadas, perpetuando un ciclo de inestabilidad económica y deterioro medioambiental que empezó mucho antes de que se adoptara el West Med MAP. En lugar de gastar fondos públicos en apuntalar a arrastreros no rentables, los ministros Planas, Chabaud y Lollobrigida deberían redirigir las ayudas a reducir el número de buques e impulsar una transición justa que promueva prácticas resilientes y de bajo impacto. Esto debería acompañarse de la recuperación de las poblaciones pesqueras, condición previa necesaria para garantizar la prosperidad a largo plazo de los pescadores”.
El informe recomienda que la Comisión Europea y los Gobiernos de Francia, Italia y España:
- Alineen las ayudas públicas y las medidas de gestión con objetivos de sostenibilidad: fomentar una flota más reducida, resiliente y selectiva que pueda operar de forma rentable explotando poblaciones pesqueras saludables.
- Reduzcan el exceso de capacidad: facilitar la salida de los buques no rentables de la flota y evitar su reubicación en otras regiones.
- Reconstruyan las poblaciones pesqueras: aplicar las medidas contempladas en el West Med MAP, como limitar los días de faena, imponer cuotas de capturas y promover artes de pesca selectivas, para permitir la recuperación de las poblaciones pesqueras.
- Apoyen una transición socioecológica justa: proporcionar ayuda financiera y formación para ayudar a los pescadores y las comunidades a adaptarse a prácticas sostenibles y promover las iniciativas de recapacitación y diversificación.
- Inviertan en la sostenibilidad a largo plazo: redirigir los subsidios hacia artes sostenibles y métodos de pesca selectivos, así como impulsar la resiliencia económica de la flota.
Conclusiones del informe:
- Los grandes arrastreros franceses (por encima de los 24 m de eslora) y arrastreros italianos (por debajo de los 12 m) llevan años sin ser rentables.
- Los arrastreros franceses (por debajo de los 18 m), arrastreros italianos (por encima de los 18 m) y arrastreros españoles (por encima de 18 m) también sufren una fragilidad económica crónica.
- Solo tres segmentos de arrastreros de fondo —los arrastreros españoles (de menos de 12 m y entre 12 y 18 m) e italianos (12–18 m)— revelan márgenes netos de beneficios por encima del umbral de viabilidad a largo plazo del 10%.
Según el informe, alrededor de 19 millones de euros en concepto de subsidios públicos nacionales —incluidas ayudas por la COVID, compensaciones por la disminución de días de faena en el marco del West Med MAP y apoyos vinculados al encarecimiento del combustible tras la guerra en Ucrania— han amortiguado temporalmente las pérdidas en algunos segmentos de arrastreros, pero no han paliado los retos económicos estructurales subyacentes para la mayoría.
Nota a los editores:
- El informe analiza diez segmentos de arrastreros de fondo —de entre 6 y 40 m de eslora— de Francia, Italia y España que operan en el Mediterráneo occidental.
- Se apoya en datos económicos oficiales de la UE y en los registros nacionales de subsidios pesqueros entre 2014 y 2022.
- Para limitar la sobrepesca y reconstruir la abundancia de peces, la UE adoptó el plan plurianual para el Mediterráneo occidental en 2019, fijando como plazo legal para poner fin a la sobrepesca 1 de enero de 2025. Un objetivo no alcanzado.
- Cada año, en el Consejo AGRIFISH de diciembre, Francia, Italia, España y la Comisión Europea deciden las cuotas de capturas y días de faena en el Mediterráneo occidental para el año siguiente.
- He aquí los subsidios distribuidos a los distintos segmentos de arrastreros de fondo en el Mediterráneo occidental, desglosados por país, para el periodo 2019-2024:
○ Francia: €1.724.000
○ España: €4.537.000
○ Italia: €12.977.000 Total: €19.238.000.
