La Alianza Cero Deforestación califica de irresponsable la propuesta de la Comisión Europea de aplazar un año la normativa contra la deforestación
- La presión desde varios frentes ha provocado que la Comisión Europea plantee retrasar un año la entrada en vigor de la regulación para combatir la deforestación, que estaba prevista para enero de 2025.
- La Alianza Cero Deforestación realiza un llamamiento al Parlamento Europeo y al Consejo de la Unión Europea para que rechacen este retraso y exijan la puesta en marcha del reglamento para proteger a las personas, los ecosistemas, el clima y los derechos humanos.
Con esta propuesta la Comisión Europea otorga más importancia a los intereses de las empresas que a las personas que se verán afectadas por el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. De aprobarse la propuesta de la Comisión Europea, se permitiría que la deforestación continúe durante 12 meses, más dando la espalda a 1,2 millones de personas que apoyaron poner fin a la deforestación provocada por el consumo europeo. Reitera la inacción ante la crisis socioambiental global, y el retroceso (liderado por el Partido Popular Europeo) en las legislaciones de protección ambiental. Este retraso penaliza injustamente a aquellas empresas que ya han realizado importantes inversiones para cumplir con el EUDR, al tiempo que recompensa a los que se han quedado atrás. El único beneficiario del retraso son las grandes empresas de la industria de piensos, madereras, cárnicas, de agrocombustibles, celulosa, automóviles y gran distribución que llevan tiempo presionando como lobby en Bruselas para hacer descarrilar este reglamento.
La Alianza Cero Deforestación efectúa un llamamiento al Parlamento Europeo y al Consejo de la Unión Europea (UE) para que rechacen este retraso y exijan la puesta en marcha del reglamento para proteger a las personas, los ecosistemas, el clima y los derechos humanos. La lucha contra la deforestación no puede esperar. El año pasado el mundo perdió una superficie forestal casi tan grande como Suiza; una destrucción que liberó aproximadamente la mitad de dióxido de carbono que Estados Unidos emitió por la quema de combustibles fósiles. Utilizando los propios cálculos de la UE, este retraso supondría la destrucción de 2.300 km² de bosque. Dicho de otro modo, por cada minuto que se retrase la aplicación de la ley, se arrasaría una superficie forestal del tamaño de un campo de fútbol. Las emisiones resultantes equivaldrían a las de 18 millones de coches.
La propuesta de la Comisión Europea es irresponsable, al mismo tiempo que el Pantanal brasileño (el mayor humedal tropical del mundo y uno de los santuarios de biodiversidad más importantes del planeta) se enfrenta a incendios sin precedentes. Al igual que los bosques de Paraguay, Bolivia y Argentina, los fuegos son causados deliberadamente por la agroindustria para producir pastos o cultivar soja, maíz, caña de azúcar o algodón. Estos incendios masivos provocan más emisiones de carbono a la atmósfera, lo que aleja el objetivo del Acuerdo de París de limitar el calentamiento global a 1,5ºC. El calentamiento global, a su vez, es un factor de aceleración de los incendios en todo el planeta en una espiral destructiva dramática, con efectos directos sobre la vida humana: reducción de cosechas, aumento de la frecuencia de fenómenos climáticos extremos, desertificación, etc.
Las organizaciones de la Alianza Cero Deforestación urgen a las autoridades europeas, y singularmente a la candidata a vicepresidenta de la Comisión Europea Teresa Ribera y a la presidenta Ursula von der Leyen, a descartar esta maniobra de dilación del reglamento EUDR, a mantener la fecha de aplicación efectiva de la normativa, y a redoblar los esfuerzos en los Estados miembros, en colaboración con los países productores. La Comisión Europea debe demostrar su voluntad con una UE comprometida con la transición ecológica.